lunes, 28 de noviembre de 2011

AMATISTA

Perteneciente a la familia de los cuarzos, la amatista es una piedra semipreciosa. Su color lo determina el hierro que contiene, pudiendo variar del púrpura intenso al azul celeste. Los egipcios la apreciaban tanto que la consagración al dios lunar Toth; los griegos la asociaron a Mercurio, y fue también la gema preferida de los hebreos. San Juan la consideró la piedra base de la ciudad celestial del Apocalipsis. Más tarde, en el Medioevo, fue utilizada en forma de cuentas para confeccionar rosarios, por su pureza y su poder para inducir a la meditación. Las amatistas más bellas se encuentran en los ricos yacimientos de Brasil, Sudáfrica y México. Asimismo, las arenas de Sri Lanka contienen amatistas de procedencia aluvial.

El valor de la amatista depende de la belleza y uniformidad de su color, en el pasado fue considerada una piedra de gran prestigio, y llegó a ser tan deseada como el diamante. Hoy día se emplea en abalorios y joyas menores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario